Tal vez repitamos muchos clichés a la hora de analizar o profundizar en cuestiones musicales, mencionamos decálogos imaginarios o nos excedemos en citar géneros y artistas para argumentar nuestro discurso. Quizás seamos herméticos, incluso cándidos. Hasta podríamos ser monótonos. Sea como fuere, seguiremos insistiendo y defendiendo la calidad venga de donde venga. Ya sea Arizona, Suecia o Zaragoza, de donde vienen precisamente The Kleejoss Band. Llevamos tiempo hablando de ellos, pero algún día teníamos que hablar con ellos, teníamos que conocer de primera mano esas curiosidades que desde la distancia sospechamos y nos transmiten sus canciones. The Walk On Project Festival era la excusa perfecta para conversar unos minutos con Luis Kleiser, cantante y guitarrista del cuarteto que completan Joss Mayoral (batería), Guillermo Mata (bajo) y Coco Kin (guitarra).
Gracias por atendernos, Luis. Podríamos decir que vuestra historia es corta pero intensa e infrecuente en estos días, porque a disco por año, ¿no es un temeridad?
«Siempre decimos lo mismo… O estás tocando en directo o estás escribiendo y grabando música. Esto lo haces porque te gusta; no tiene mucho sentido parar si estás disfrutando del proceso. De todas formas, esto no es nada nuevo; en los años 60 y 70 tenías bandas que eran capaces de sacar dos discos gloriosos por año. Nos hemos acostumbrado en este siglo a espaciar las ediciones y esto nos parece una locura, pero mientras seamos capaces de generar material del que nos sintamos orgullosos, ¿por qué tenerlo encerrado?»
Al paso que vais, ¿tendremos cuarto el año que viene?
«Pues tenemos algo en marcha que puede suponer ese cuarto disco en 2017. No puedo revelar mucho todavía. Sino, en 2018 seguro que tenemos nuevo álbum y prometemos que será espectacular.»
¿Hay evolución en vuestra concepción musical desde vuestras primeras canciones hasta “River Sound Unleashed”?
«Sí, sin duda. Las canciones de nuestro primer álbum se pensaron para ser tocadas por guitarra y batería en una banda de dos piezas. Después se añadieron más instrumentos y músicos, pero el germen fue ese. En los siguientes discos hemos contado con una banda completa que aporta nuevas ideas y detalles a los temas, así que es inevitable que se exista esa evolución. Es algo positivo, tienes más cabezas pensando y remando en la misma dirección y cuando escribes ahora piensas mucho más en arreglos para el tema. Eso no estaba tan claro al principio, en aquel momento era todo más crudo.»
Por cierto, “Wind City Haze” es un muy buen álbum debut. ¿Recuerdas esa primera sensación?
«Perfectamente. Recuerdo las ganas de ver cómo quedaba aquello. Algunos temas estaban aún muy verdes cuando nos pusimos a grabar y fueron creciendo sobre la marcha así que cada día podías ver cambios radicales en algunas canciones. Lo grabamos en nuestro local de ensayo y creo que el estar solos enfrentándonos a nosotros mismos fue lo que terminó de crear esa sensación de banda que tenemos ahora.»
Este último disco tiene grandes composiciones, elementos varios que hacen de él una creación muy equilibrada donde todo discurre como en el caudal de un río. ¿Participáis todos en ese proceso creativo?
«Pues todos los temas nacen generalmente de una idea con una guitarra grabada con el móvil en cualquier lugar de mi casa. Le mando ese video cutre a Joss, y si estamos de acuerdo en que de eso se puede sacar un tema nos ponemos manos a la obra entre los dos. Cuando ya lo tenemos muy construido lo enseñamos al resto de la banda. Ahí es donde se generan los arreglos o cambios de notas; alargas una parte, quitas otra, o incluso descartas el tema. Pero nos gusta que cuando trabajamos los cuatro juntos lo hagamos sobre un esqueleto bastante bien montado. En otras bandas que hemos estado el proceso creativo era absolutamente común y no funcionaba del todo bien. Eso es lento, requiere invertir rato y rato en negociaciones, y tiene que pillar a todo el mundo a la vez en el mismo estado de inspiración y con una concepción del tema muy similar. Es tan complejo que se alineen los astros en ese sentido que te puedes pegar meses para acabar un par de temas. Con este sistema nuestro la cosa fluye mucho mejor. Seguramente no es una manera perfecta, pero a nosotros nos funciona bien.»
A todo esto, enhorabuena por el trabajo, no seremos nosotros quienes digan que parece estar hecho en… Cuando en realidad se realizó aquí, con vuestros medios. ¿Es la única salida autoeditar?
«No, claro que no. Hay gente que trabaja con sellos discográficos que les echan una mano. Pero en nuestro caso, no estábamos dispuestos a andar de puerta en puerta mostrando nuestro trabajo y esperando que alguien nos diera el visto bueno y arriesgara su dinero. Llevamos ya tres discos en tres años y aún no ha llamado nadie, seguramente porque no generamos el interés suficiente como para que alguien se la juegue por nosotros. Si ese momento llega lo estudiaremos detenidamente, pero tenemos claro que pertenecer a un sello nos tiene que aportar facilidades y llevarnos hasta donde no hemos podido llegar hasta ahora. ¿Hay alguien ahí?» (risas)
Vaya, hasta ahora no habíamos hablado de vosotros. ¿Quiénes sois y cómo se forma la banda?
«Pues comenzamos Joss y yo tocando canciones por diversión y pensando en montar un dúo de batería y guitarra. De vez en cuando pasaba algún amigo por el local para ver en que estábamos metidos y agarraba un instrumento para acompañarnos. Eso nos hizo ver que todo crecía con más gente implicada y que con una formación clásica de cuartero rockero podíamos sonar realmente bien. Así llegó Guillermo que agarró el bajo y ahora tenemos a Coco a la guitarra. Todos llevamos muchos años tocando en bandas y grabando discos; sabemos de qué va esto y a lo que hemos venido. Es muy fácil tocar con esta gente con tanto talento; todo empieza a sonar rápidamente.»
Vuestras referencias pueden ser evidentes o pensamos que lo podrían ser, pero, ¿en qué terrenos musicales se maneja The Kleejoss Band?
«Pues no le ponemos puertas al campo, pero nos gustan los grandes nombres de la historia de la música. A partir de ahí todo cabe, pero siempre con respeto a la música y a nosotros mismos. Nos importan más las canciones que las pintas o que ser portada de una revista. Tenemos muy claro que no estamos en esto para innovar, que para eso ya está la escena indie… Aunque a mí me suenen todos parecido… Nosotros a lo nuestro, al rock de toda la vida. Ya lo dije una vez, somos más de huevos rotos que de deconstrucciones de foie.»
Bastantes músicos amigos nos hablan siempre del hormigueo previo a un concierto o una grabación. ¿Cómo lo lleváis vosotros?
«Pues depende de días. Si llevamos un par de meses sin tocar, o es el primer bolo de presentación de un nuevo disco siempre hay algo de nervios. Ahora por ejemplo estamos tocando uno o dos bolos por semana, así que salimos super tranquilos y con ganas de pasarlo bien. De todas maneras, eso de los nervios desaparece con el primer acorde.»
De vuestra tierra conocemos a The Fire Tornados, Mama Kin, The Expansive Awareness, vosotros evidentemente… ¿Cómo está la escena maña actualmente?
«Pues anda bien en cuanto a bandas y salas para tocar, y regular en cuanto a público. Falta llegar a las nuevas generaciones…»
Y por extensión, ¿cómo ves la nacional?
«Pues parecido a la maña. No estamos consiguiendo atraer a esos menores de 25 o incluso me atrevería a decir de 30. Parece que ya no es cool comprar discos o ir a conciertos… Eso nos preocupa, así que a ver si arrimamos el hombro entre todos y le enseñamos a esta generación del reggaetón y del spotify lo que vale un peine. A ver si montamos una fundación de esas de ‘Pon un disco en tu vida’ o ‘Apadrina una banda’.» (risas)
Este año sois una de las bandas elegidas (091 y Kurt Baker) dentro del WOP Festival. ¿Conoces algo de la fundación?
«Si, hacen un trabajo admirable. Conseguir que a través de la música se generen fondos para tratamientos que ayuden a niños con enfermedades muy complicadas es maravilloso. ¿Hay algo más bonito que la solidaridad desde la música?»
El año pasado en el WOP participaron Los Brazos y después fueron al Azkena Rock Festival… Imaginamos que os haría ilusión.
«Pues si, pero no hay que volverse locos. Sabemos que con trabajo todo termina llegando tarde o temprano. Esto nos es una ecuación matemática en la que tocas aquí y por lo tanto vas a tocar allá. Apenas llevamos tres años con la banda así que es perfectamente lógico que los responsables de festivales puedan pensar en formaciones más consolidadas. Ahora, si nos llaman lo celebraremos y nos encargaremos de hacer un bolo memorable.»
Ya que hablamos de conciertos, ¿qué podemos esperar de vuestra actuación?
«Cuatro músicos defendiendo su material y disfrutando muchísimo en el escenario. Será un bolo intenso. Tenemos algo menos de una hora para tocar. El objetivo es que a la gente se le haga corto y se quede con ganas de más y que aquellos que no nos conozcan tengan ganas de investigar y acercarse a nuestra música. Pero saldremos a tumba abierta, como siempre.»
Gracias chicos, nos vemos en el camino.
Las fechas y lugares confirmadas de The Kleejoss Band spanish tour 2016 son:
Sábado 19 noviembre en Bilbao (The Walk On Project Festival junto a 091 y Kurt Baker), Santana 27
Viernes 25 noviembre en Castellón Veneno Stereo
Viernes 9 diciembre en Pontevedra Sala Karma
Sábado 10 diciembre en Cangas, Salason
Domingo 11 diciembre en Vigo, El Patio de Bouzas
Sábado 17 diciembre en Remolinos (Zaragoza), Salón Cultural
Domingo 25 diciembre en Zaragoza (Xmas Show), Rock & Blues
Una declaración de intenciones