Desde Barcelona nos llega  esta crónica de los canadienses Stone River, una banda que está dejando a todos aquellos que se acercan hasta sus conciertos con un grato sabor de boca. Muchos son los que aún no los conocen, algunos de los afortunados que ya los han visto sin embargo se han hecho fans de los cinco de Toronto nada as ecuchar el primer acorde, otros sin embargo estamos deseosos de poder ternerlos frente a frente y sentir esa magia desprendida por una de las mejores bandas que han cruzado el Atlántico. Pero de un modo u otro, ahora gracias a crónicas como esta podemos conocerlos un poco mejor y de este modo  revivir una noche a Stone River.

Miércoles 28 de enero de 2015 en Rocksound, Barcelona

Y por fin llega el deseado miércoles. Llevamos días esperando para este bolo. Muchas ganas acumuladas para ver y disfrutar con los canadienses.

Nos echamos a la espalda unos 50 km. (como siempre) y llegamos a la sala Rocksound con tiempo suficiente para saludar a los conocidos y echarle un ojo al “Merchandising” (eso es importante siempre, jajaja). Los músicos ya andan por ahí dando vueltas y observando a la gente coger posiciones. Seríamos unos 40 o 50 los afortunados, teniendo en cuenta el día entre semana y la oferta deportiva televisiva, no estaba nada mal. Gente incluso de Calella y Blanes llegaron para el evento.

A las 21.50 aprox. suben al escenario los chicos de Toronto. Nosotros, provistos de cerveza y en primera fila (para no perder detalle) ya estamos listos para lo que se avecina.

Los primeros acordes eclesiásticos de “River we Crossed” junto a la intro de Renan a la guitarra nos auguran una gran noche. El primer temazo ya está ahí!!  Esa intro hipnotizante, esos coros que te envuelven, esas melodías a las seis cuerdas, cruce de guitarras…ya estamos “liaos”. “Southern Feeling” el siguiente en caer seguido de “Dust  and Stones” temazo con el que ya no paramos quietos un segundo. Ya nos retorcemos como animales y nuestros cuellos sufren serio riesgo de esguince cervical.

Con “Come On” sudamos, con “Cold Black River” gritamos, o al revés, ¡¡que se yo!! Los temazos se suceden y el riesgo de lesión está presente. “Thank You” nos da un pequeño respiro, pero pequeño, ¡eh! Ahí llega “Whipping Post” de los Allman, celebrada por todos, donde las guitarras toman el protagonismo (otra vez). “Euphoria” sería la última del setlist… que os podría contar de ese momento, demasiadas emociones juntas, ahora mismo mientras  intento reflejar con este texto lo vivido esa noche, «Euphoria» está sonando en mi equipo de música devolviéndome de modo espiritual  una vez más a la Rocksound. No sé cuanto duró pero ¡¡debería haber durado más!! Tremendo tema con majestuosas guitarras, ¡¡demoledor en directo!!

Aplausos, gritos, silbidos, y la banda regresa con otro tema. Quizá por petición (de algún amigo durante todo el bolo a grito “pelao” jajaja) o ya programada, “Hanging InThe Bowline”. De nuevo nuestro físico sufre pero merece la pena. Rematamos la noche con un tema “stoniano” donde echamos el resto que nos quedaba.

Al final saludos con la banda, cd’s firmados y unas foticos bien chulas. Buenos tipos. Quizá lo único reprochable fue la duración del bolo, unos 70´. Pero hablando con Renan me contó que en Canadá sus bolos son de 40/45´. Así que de algún modo nos sentimos afortunados!!

Mi agradecimiento a Teenage Head Music, a Rocksound y a todos aquellos que hacen posible nuestros sueños. Noches como esta son las que te hacen sentir vivo. Grandes Stone River. 

Os dejamos con el vídeo que grabamos en su primer concierto en el Keska Taberna, así comenzó su gira española.