Son bastantes los amigos que comparten sus impresiones e hipotecan minutos de su tiempo para estar con todos nosotros, como es en este caso. Un ejemplo palpable de amistad, porque como todos sabéis esta labor es puramente amateur y Juan ha tenido unos días revoltosos en los que su preocupación se centraba en desterrar la gripe. ¿Lo habrá conseguido? Quién sabe, esperemos que si… pero un apunte. Si es capaz de concentrar todas las sensaciones vividas y describir de tal manera bajo los efectos de algún antigripal… Perdonadme, pero en este caso apoyo a la industria farmacéutica por tan digna labor. ¡Ah! Se me olvidaba. Gran pluma y gran ojo. Como hace tiempo para ello, mantita, calor, un colacao o cafecito, amena lectura y Rock&Roll.
Antes de la crónica del concierto de Maeso en Avilés, os reproducimos parte de la conversación mantenida entre dos amigos, uno que había asistido a dicho bolo y otro que desde la distancia estaba impaciente por saber como había sido esa noche de rock y pasión.
Viernes 16 de enero de 2015 en Centro Niemeyer, Avilés
Rafa: Por cierto, imagino que Maeso una nota muy alta
Juan: Altísima… Me gustó muchísimo, hacía tiempo que tenía ganas de ver y escuchar buen soul y él lo da a puñados… Ese teclado sonaba de maravilla… Al final estaba un poco cargado (yo) y quizás no lo disfruté del todo, pero me gustó muchísimo.
Rafa: Unos tipos muy cercanos
Juan: No pude quedarme a hablar con ellos, pero detallitos durante el concierto así lo daba a entender… Eso si, les echó una bronca a unos que no paraban de hablar… Y la verdad es que estaban molestando un montón… Sobre todo en los temas más íntimos…
Rafa: Aquí igual. Les pegamos el toque a dos garrulos y Julián se puso de nuestro lado. En todos los sitios cuecen habas, y gente maleducada hay en todos los sitios. Eso si, chapeau por Maeso.
Juan: Y pensar que hace unos meses lo tenía como un hypster… Por lo que había leído era la impresión que me daba… Menos mal que me sacasteis de mi error…
Rafa: Yo lo tenía en un rinconcito muy bien escondido, la verdad es que desde la gira con Quique González de Daiquiri Blues me tenía ganado, antes pensaba igual que tú, con los Sunday Drivers no les sacaba jugo.
Juan: Maeso es de esos músicos que cuando te das cuenta de lo bueno que es, deseas haberle descubierto mucho antes… Pero en el par de meses que llevo escuchando sus discos me ha atrapado de aquella manera… Su sonido tanto en disco como en directo es algo que te deja noqueado, pero no desde la fuerza, si no desde el alma…»
Tras leer esta conversación, os podéis hacer una idea de lo que Julián Maeso entrega en cada concierto que ofrece. Y por supuesto no fue menos lo que nos regaló el pasado viernes en la sala Club del Centro Niemeyer de Avilés.
El concierto comenzó de una forma tranquila, sin sobresaltos, con uno de los temas de su primer disco, “Will You Be Free”, que nos mostraba los derroteros por donde se desarrollaría todo el bolo. Soul sobre todas las cosas, sentimiento y buen hacer. A continuación los dos primeros temas de su último disco subían la intensidad, sin perder el alma y comenzando a mostrar la maestría de Julián con su Hammond. De vuelta a su primera entrega discográfica, nos ofreció las Dylanianas “Men & Ladies” y “Who Needs What”, demostrando de nuevo que es capaz de hacer maravillas musicales aunque en la primera se echó de menos el acompañamiento de la voz femenina que tanto gusto le da al tema en su versión grabada… Y así continuó durante el resto del show, saltando de un disco a otro y mezclando intensidad y momentos de calma. Y de igual manera también mezcló sus propios temas con versiones, a través de grandes medleys como aquel en el que unió su “Little By Little” con el “Stratus” de Billy Cobham o el “One Way Ticket To Saturn” con un tema de James Brown. Soul, funk, blues…Toda una gama de sonoridades que invadieron el espíritu de los allí congregados.
No obstante, y si queremos ponerle algún pero a la actuación, se produjeron momentos en que, por lo menos para los no iniciados como yo, la cosa se volvía un poco lenta. Quizás acostumbrado a grupos más directos, con más garra, los devaneos de Julián con su teclado, creando atmósferas, te empujaban a escaparte un poco del lugar…. O quizás fuese el catarro que arrastraba. No sé. La próxima vez que se acerque por estos lares, sin duda volveré y estaré ahí para comprobarlo.
Este vídeo pertenece a otro concierto, pero os lo colgamos para que tengas aparte de las elocuentes palabras de nuestro compañero Juan Tomé, una referencia sonora y visual de como son los bolos de Julian Maeso band.. uno de los pocos grupos nacionales que desde GravelRoad76 seguiremos respaldando con los ojos cerrados.