Bueno, pues sí, Starroy finalizaron su tour por Europa la noche del 08.10.2014 en Zaragoza. Nosotros nos empeñamos en seguir sus pasos durante todo su tour y prácticamente lo hemos conseguido. Es el momento de agradecer a cada amigo que ha realizado el esfuerzo pertinente para describirnos lo vivido la noche que la banda de Arkansas tocaba en su ciudad. Nuestro objetivo era claro, aunar fuerzas entre todos y de este modo amparar a una de las bandas más admiradas por la familia GravelRoad76 en los últimos años.
Ojalá consigamos verlos subidos en un gran escenario, ojalá terminen siendo una de esas grandes intocables, pero sea así o no, para nosotros ellos siempre tendrán un lugar privilegiado.
Sin más rodeos, os dejamos la última de las visiones de una noche con Starroy. En esta ocasión este especial tiene valor añadido, porque está realizado por una buena amiga a la cual admiramos y sabemos de sus dificultades para poder acercarse a ver un concierto. Gracias a Noe, a continuación podremos tener una percepción de lo vivido la noche que Starroy ante una escasa audiencia, voló por los aires la Rocksound de Barcelona.
Domingo 5 de octubre de 2014 en Rocksound, Barcelona
Se aproximaban las nueve y media de la noche del domingo día cinco de octubre, fecha que quedará en nuestro recuerdo. Con una leve llovizna cayendo sobre nosotros, corríamos por la calle preocupados por llegar justos y perdernos el principio de un concierto que habíamos esperado durante mucho tiempo. Por fin llegábamos a nuestra querida Rocksound.
En la sala se respiraba tranquilidad, quizá demasiada. Con la banda a un lado de la barra charlando mientras se tomaban una copa y un buen puñado de tímidos que les observábamos desde el lado opuesto de ésta sin ánimo de molestar, nos invadía esa sensación de culpabilidad indirecta al ver que un grupazo como Starroy no había tenido la asistencia que esperábamos encontrar pese a ser domingo.
Tras esperar unos minutos (que a una servidora se le hicieron eternos) con el fin de dar tiempo a llegar a los últimos descarriados, los chicos de Arkansas dan el último trago en la barra y se aproximan al escenario seguidos de los impacientes que hicimos acto de presencia, deseosos de empaparnos con su música.
Jacob rompió el silencio rítmicamente tras la batería mientras todos tomaban posiciones. Incorporándose rápidamente con el bajo, “barefoot” Justin entró en escena acompañado de Cameron y Barry. Adam bailaba suave y grácilmente las notas que preludiaban “Empty Cup”, uno de los grandes temas de su nuevo y esperado trabajo, que sin duda es perfecto para dar comienzo a una gran noche. Adam hizo gala de una voz increíble, una de esas voces que a medida que transcurren los temas tiene más y más matices, más y más garra.
Pese a que aquella noche no fue precisamente un “sold out”, todos y cada uno de los integrantes lo dieron todo en el escenario, intercalando temas de sus dos trabajos y alguna que otra versión de los Eagles y Jane’s Addiction a las que Adam les dio la vuelta para hacerlas suyas.
La tímida explosión de energía a la batería llamada Jacob, al bajo el instigador del “headbanging” en toda la sala de nombre Justin, el joven pero chocante y seguro Cameron a la guitarra, el virtuoso de la Gibson SG conocido como Barry y Adam, LA VOZ, fueron los culpables de que una servidora sintiese una tristeza inmensa por tener que abandonar la sala antes de la finalización de tan tremendo espectáculo musical.
Nos despedimos de la familia rockera sin querer incordiarles en pleno éxtasis musical, y muy a nuestro pesar, nos alejamos de la Rocksound mientras escuchábamos las últimas notas cada vez más y más lejanas mientras nos apresurábamos para no perder el último tren de vuelta.
Quizá no vivimos el concierto entero, quizá muchos no se habrían pegado un viaje de ida de hora y media y otro de vuelta para estar el rato que nosotros estuvimos, pero os puedo asegurar que valió la pena hasta el último segundo que pudimos presenciar la magia de estos chicos de Arkansas, de la cual nos hemos quedado completamente prendados. Y sobre todo, quizá algún día pueda quitarme esta espinita, la cuál irá conmigo hasta el día que pueda redimirme.
Volverán en 2015. No os los perdáis por nada del mundo, Starroy grabado a fuego en nuestras mentes.