El gasteiztarra Javier Arteaga, conocido en el mundillo musical como Javi Free y más conocido aún por ser organista en formaciones como Freetangas, The Faithless o The Soulbreaker Company, ha publicado recientemente “Kyoko”, su ópera prima que, por ahora, se encuentra disponible en las plataformas digitales a la espera de su edición en vinilo prevista para mayo y ha sido presentada como el primer volumen de una futura trilogía, así que habrá que permanecer ojo avizor. ¿Un objetivo perseguido durante años? Quizá. ¿Una especie de utopía convertida en realidad? Puede que también. ¿Una obsesión o una exploración? Ambas podrían ser. ¿Un síntoma de inquietud? Con absoluta seguridad, sí. Y para esta nueva odisea en la que se ha embarcado, cuenta con la inestimable aportación de Roberto Nieves, guitarrista de Entropía y su compañero en las filas de la sociedad rompealmas, el baterista Guille Colás.
Después del frenético ritmo de vida publicando discos, cruzando fronteras y recorriendo cientos o miles de kilómetros junto a las bandas anteriormente citadas, llegaría ese atolladero tantas veces nombrado y odiado en el que fueron surgiendo diversas ideas. Puede que también ese obligado parón fuera beneficioso para ordenar esas ideas o trabajar sobre ellas, y con la ayuda del baterista fue moldeando un material que se mantuvo almacenado con el ánimo de recuperarlo algún día. Pues afortunadamente, y con la contribución del guitarrista, ese día llegó. Para todas las partes. Indiscutiblemente, para Javi Free, para su apuesta, para su proyecto personal. Para la gente que sigue sus diferentes rumbos y de alguna manera es admiradora de las psicodélicas progresiones o todo un glosario de naturalezas atribuibles a esa avenencia sensorial. Para el colectivo organizativo, para el circuito de salas y la situación actual.
En este contexto de urgencias e inercias, de información o adulterada información, de inteligencia artificial o triviales artificios, el arte en toda su extensión cobra un papel trascendental en su mensaje e intrínseco sentido. En ambos casos, incluso en formas. Y en “Kyoko” los sentidos, los símbolos y las percepciones tienen su vital importancia, ya que hablamos de un trabajo instrumental que nos conduce a espacios abstraídos y profundamente realistas, a espacios liberadores, a espacios apartados y a la vez cercanos. A espacios o estructuras como “Leaving Earth” que no necesita mayor explicación o desarrollo a un título suficientemente explícito. A subterráneos lugares como “Replicant” donde las resonancias interpelan y llaman la atención, o a retiros como “Kyoko” que tal vez se encuentre en el Lejano Oriente o en el subconsciente, vaya usted a saber. ¿Se encontrará en los ensayos de “Humanoid Bioengineering”? Es un misterio que tendrá continuación en las próximas entregas de la trilogía “Human Futility vs. Cyberlife”, conjeturas y premisas de Javi Free.

Excelente trabajo!!!
Me gustaMe gusta