
Todavía no hemos entrado en época estival y llevamos, al menos en Mordor, un par de días con las típicas tormentas veraniegas más escandalosas que duraderas. Vamos, que los truenos y relámpagos monopolizan un cielo que encapotado revierte después de haber lucido un espléndido aspecto. Mañana viernes ocurrirá lo mismo. Mañana día 18 sobre las 19:30 se espera la llegada a Derio de una borrasca proveniente de Cantabria que dejará, con toda seguridad, un rastro inolvidable. Sin haber consultado en el espacio cibernético lo sabemos. Sin ser meteorólogos, brujos, zahoríes o agoreros lo sabemos. Sin controlar demasiado las témporas o los cambios de viento, lo sabemos, porque Hendrik Röver y Los Míticos GTs dejarán su impronta cual tormenta sonora en un Baserri Antzokia que dicho sea de paso, está ofreciendo una diversa y atractiva programación en este tiempo de desatinos y escarnios sufridos.
Ya hemos hablado con anterioridad de esta nueva plaza que tan nueva no es, pero si hay que volver a ofrecer un par de apuntes, manos a la obra. El Baserri Antzokia es un espacio sociocultural próximo al Parque Tecnológico de Derio (municipio cercano a Bilbao) que, al igual que el resto de recintos repartidos por el territorio de semejante denominación, impulsa la cultura por medio de diferentes actividades. Sus gerentes, Gorka y Ianire, accedieron a prestar sus instalaciones para la celebración de conciertos tras recibir la llamada de Gaizka, responsable de la sala Azkena. Mucho ha bregado el hombre buscando una salida a este laberinto, y en este agradable entorno ha encontrado, tanto él y como el equipo de la sala bilbaína, una perfecta escapatoria a sus preocupaciones. Tenemos entendido que las asistencias están rozando, incluso completando el aforo, y buena parte de la afición repite visita al Baserri. Tenemos entendido que la repercusión está siendo muy positiva. Tenemos entendido que la simbiosis Baserri-Azkena tiene visos de continuidad.
Mañana es un día propicio para repetir. Mañana sería buena oportunidad para un viajecito a Derio, pues repetiríamos frente Hendrik Röver y Los Míticos GTs una vez más. La última fue poco antes de este maldito galimatías. La última fue en invierno (aunque la jornada fuera primaveral) a la hora del aperitivo, con bailes entre los asistentes y eufórico ambiente. Mañana seguiremos en primavera (aunque se comporte en determinados momentos invernal), habrá que cambiar el aperitivo por la merienda-cena y los bailes por las butacas. Ahora, la euforia… Eso ni se contempla. Sea junto a Los Míticos GTs, sea junto a Los Deltonos o en solitario, los oficios del señor Röver tienen un gran componente reconstituyente para aquellos que los presencien, pues sus perspicaces misivas resultan tan eficaces como su explosivo surtido de ecos fundamentados en el viejo y amado Blues. Con el contrabajista Goyo Chiquito (la G) y el baterista Toño López Baños (la T) quizás dé la sensación de aproximarse al rollo country, pero embiste con su carismática combinación de sonidos basados en los célebres doce compases: Honky Tonk, Swing, Shuffle, Country, Ragtime, Boogie, o Rock and Roll defendidos con la misma seguridad que el sonido Tin Pan Alley, el Chicago Blues o el Delta Blues de los que es firme valedor. Su último disco así lo atestiguaba. Su último disco, si bien es la única certeza de la vida, era una especie de premonición. Su último disco será probablemente el eje de la actuación, pero alguna sorpresa caerá, eso seguro. ¿Se lo va usted a perder?
Entadas disponibles en venta anticipada en www.wegow.com y en taquilla de Baserri Antzokia (12-15€ respectivamente)