Tres fechas, tres oportunidades para ver a Nikki Lane, esa chica que un día decidió dejar los estudios en su natal Greenville, Carolina del Sur, para comenzar a trabajar como diseñadora de ropa y posteriormente buscar nuevos horizontes en Los Angeles y N.Y.. Nikki Lane, esa chica que entró en el mundo de la música por desamor, y sus primeras canciones, esas que componen su álbum de debut «Walk of Shame» (2011), las escribiera como cuando su pareja (un músico de country) decidió abandonarla por ir en busca de su propio sueño americano y trasladarse a Alabama para grabar su propio disco.

Con este primer disco despierta el interés de muchos caza talentos, su dulce rostro, esa imagen de chica endeble y rebelde, su sensibilidad a la hora de cantar, sus letras y sobre todo su música no pasan desapercibidas, tanto que su segundo álbum, «All or Nothin» (2014) es grabado de modo completamente gratuito en los estudios Easy Eye Sound, sí la casa de Dan Auerbach de The Black Keys. El propio Dan se encargaría de la producción y hará su pertinente aparición en el disco cantando junto a Nikki en «Love’s on Fire».

La vida no le ha ido mal a Nikki Lane, estableciéndose definitivamente en Nashville, donde regenta su propia tienda de ropa aparte de seguir con la música. Este 2017 graba su tercer trabajo, un disco donde, al contrario del primero, surge del amor. La relación que mantiene con el cantante y compositor Jonathan Tyler es un punto de inflexión en su modo de ver la vida y ello se puede apreciar en esta maravilla llamada «Highway Queen» álbum coproducido por la propia Nikki y Jonathan Tyler y que sería grabado entre los Echo Lab estudios de Matt Pence en Denton, Texas y el Club Roar con Collin Dupuis en Nashville, Tennessee. Canciones donde las guitarras y un contundente base rítmica cogen protagonismo, letras llenas de entusiasmo, canciones bailables y cargadas de country, honky tonk, rock, pop, blues… Un disco que enamorará por partes iguales a todo amante de cualquier género de la música americana.

Ella es Nikki Lane, una de las nuevas damas del actual country rock & americana. Dulce por fuera, rebelde en su interior.

Reciente actuación en el late night show de Conan O’Brien.